Libérate del agotamiento con yoga
La agitada vida que llevamos, la cantidad de obligaciones y actividades de las que nos hacemos cargo diariamente pueden conducirnos fácilmente a un estado de extremo cansancio. Podemos liberarnos del agotamiento con la práctica del yoga.
Esta condición de estar exhaustos afecta nuestra salud física y mental. Cuando estamos agotados no podemos concentrarnos en nada, nuestro humor cambia, nos despertamos cansados, empezamos a sentir dolor de cabeza o molestias en otras partes del cuerpo. En definitiva nuestro rendimiento se ve afectado y caemos en un círculo vicioso en el que no logramos recuperar nuestra energía.
Buscar el equilibrio en nuestras vidas nos ayuda a no caer en estado de fatiga crónica. La práctica del yoga es una de las disciplinas más útiles que tenemos para buscar ese equilibrio. El yoga nos ofrece varias herramientas para reponer nuestra energía y así recuperar el equilibrio.
¿Qué es el agotamiento?
El agotamiento es un estado de cansancio extremo. Es normal que nos sintamos cansados después de un día en el que hemos tenido muchas exigencias físicas o mentales, o después de hacer un esfuerzo físico inusual y mayor.
Y lo ordinario es que nos recuperemos al tener un rato de esparcimiento, una jornada de sueño reparador, y al hidratarnos e ingerir alimentos. Pero si no logramos recuperarnos, y estamos permanentemente cansados y nos sentimos ya con pocas fuerzas al inicio del día, no estamos cansados, estamos sufriendo de agotamiento.
Cuando estamos en estado de cansancio extremo nuestro estado anímico también se afecta, cambiamos de humor continuamente sin saber por qué, y nos sentimos ansiosos y con signos de depresión. Nuestro apetito también puede cambiar, nos es difícil concentrarnos y focalizar en algo y observamos fallas en nuestra memoria.
Recuperemos nuestra energía
Una de las herramientas más poderosas que nos ofrece el yoga para recargar nuestro cuerpo es la respiración.
La respiración es una función biológica mediante la cual nuestro cuerpo intercambia gases con el medio que nos rodea. Al inhalar, además de tomar oxígeno, aportamos energía y vitalidad a nuestro cuerpo. Al exhalar, botamos dióxido de carbono y limpiamos nuestro cuerpo.
La respiración es la principal fuente de prana para nuestro organismo. Prana es la energía vital que parte de nosotros mismos y que fluye a través de todo nuestro cuerpo. La respiración tiene dos polos, la inhalación y la exhalación, así como toda fuerza se crea entre dos extremos, dos polos opuestos.
Mediante la respiración nuestro cuerpo se carga de vigor. La energía fluye por nuestro cuerpo a través de tres canales principales que son:
- el central, llamado sushumna, que corre a lo largo de nuestra columna vertebral, desde la pelvis hasta la coronilla. A lo largo de él se alinean los siete chakras principales
- ida o canal lunar, que corre por el lado izquierdo de nuestro cuerpo, coincide con nuestra fosa nasal izquierda, va paralelo a Sushumna, y al llegar al entrecejo cruza hacia el lado derecho de nuestro cerebro, y
- píngala o canal solar, que hace lo mismo por el lado derecho, va paralelo a Sushumna y al llegar al entrecejo cruza hacia el lado izquierdo y coincide con la fosa nasal derecha
La respiración solar
Con la respiración solar buscamos estimular el flujo de la energía a través de píngala o canal solar para combatir el cansancio.
La potencia que fluye a través de píngala nos trae el calor del sol y nos llena de vitalidad. Además esta energía solar elimina las impurezas de nuestro organismo, activa la digestión y tonifica nuestro sistema nervioso.
Para que ejercitemos la respiración solar, pongámonos en una posición cómoda, en un lugar y situación en los que nada nos moleste para que podamos concentrarnos en el proceso.
Tapemos nuestra fosa nasal izquierda con los dedos índice y mayor y empecemos a respirar despacio y profundamente, inhalando y exhalando por nuestra fosa nasal derecha. La mano derecha la podemos colocar en nuestro abdomen para tener conciencia de que estamos llevando el aire hasta él.
Concentrémonos y sintamos cómo el aire entra por la fosa nasal derecha trayendo a nosotros toda la carga energética del sol. Sintamos también cómo el aire sale por nuestra fosa nasal derecha limpiando nuestro cuerpo. Repitamos esta respiración lentamente, y de manera relajada todas las veces que queramos hasta sentir que nuestro cuerpo está lleno de energía.
Con esta respiración estamos estimulando el canal energético Píngala, y con ello nuestro lado de acción, de actividad y movimiento. Por ello es recomendable practicar este pranayama en la mañana y hacerlo también cuando sintamos cansancio, desgano, apatía, tristeza, depresión.
Equilibrio para liberarnos del agotamiento
Debemos mantener una vida balanceada para no caer en situación de extremo cansancio. Para ello debemos mantener en general hábitos de vida saludable que incluyen una alimentación saludable, práctica de ejercicio físico, balance en nuestras actividades diarias, es decir, dedicar tiempo al trabajo, pero también unas horas a realizar actividades recreativas que nos guste hacer, pasar tiempo al aire libre, y dedicar ratos a relacionarnos con otras personas.
La práctica del yoga es maravillosa para mantener el equilibrio entre nuestro cuerpo y nuestra mente. Dentro del yoga disponemos de las herramientas de las asanas, la meditación y la respiración para lograr ese equilibrio, mantener la flexibilidad de nuestro cuerpo y disfrutar del estado de presencia que nos permite estar aquí y ahora.
Respirar adecuadamente es fundamental para nuestra salud física y mental. Respirar de forma adecuada nos ayuda a mejorar nuestra capacidad pulmonar, mejora nuestra concentración y nuestra capacidad para enfocarnos, mejora el funcionamiento de nuestro sistema nervioso, circulatorio, cardiovascular, nos relaja y nos da serenidad y paz mental.
Entre las diversas modalidades de pranayamas, la respiración solar nos energiza particularmente y nos permite liberarnos del agotamiento. Practiquémosla como una actividad para empezar bien el día, o cuando nos sintamos cansados o agobiados por sentimientos de tristeza y pesadumbre durante el día, activemos nuestro canal píngala y dejémonos invadir por la energía del sol.