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Sana tu cuerpo respirando como los yoguis   

La respiración es una función biológica de nuestro cuerpo mediante la cual intercambiamos gases con el medio que nos rodea: tomamos oxígeno al inspirar y botamos dióxido de carbono al exhalar. Sana tu cuerpo respirando como los yoguis.

Es una función que nuestro organismo realiza de manera automática, y que nos permite mantener todas nuestras funciones vitales, nos carga de energía y tiene impacto en nuestra salud física, mental y emocional. 

Respiramos sin darnos cuenta siquiera de que lo estamos haciendo, pero cuando tomamos consciencia de la importancia de la respiración y observamos cómo lo estamos haciendo y mejoramos nuestra manera de hacerlo, nuestro bienestar se incrementa.

Respirando adecuadamente sanamos nuestro cuerpo. Y esto lo hacemos a través de la práctica del yoga, ya que la respiración, junto a las posturas y la meditación, son los elementos del yoga. Los ejercicios de respiración o pranayamas son la base del yoga, dan soporte y sentido a la meditación y a las asanas. 

Respirando como los yoguis

Quienes practican yoga aprenden a sacarle el máximo provecho a la respiración y esto tiene un impacto positivo en la salud.

Lo primero que debemos saber es que en la práctica del yoga debemos siempre inhalar y exhalar el aire por la nariz. Debemos saber también que existen tres tipos diferentes de respiración que podemos usar durante la práctica, de acuerdo al momento de nuestra práctica y a las posiciones que estemos ejecutando.

Los tres tipos básicos de respiración son:

  • baja o abdominal, en esta modalidad cuando inspiramos dirigimos el aire hacia el abdomen, al exhalar el diafragma sube y nos desinflamos. La respiración abdominal nos ayuda a relajarnos
  • torácica, cuando realizamos respiración torácica elevamos los hombros al inhalar, y al exhalar los dejamos caer y nuestro abdomen se contrae al expulsar el aire. La ejecución de este tipo de respiración requiere de mucha energía
  • completa o profunda, en esta modalidad inspiramos llenado nuestros pulmones y sentimos que las costillas se abren. Exhalaremos luego por la boca, y las costillas se contraen.

Si nos estamos iniciando en la práctica del yoga, la recomendación es practicar la respiración abdominal. En la medida que avancemos en nuestra práctica podemos incorporar la respiración completa.  Observa cómo sana tu cuerpo respirando como los yoguis.

Los tres principales canales de energía

Mediante la respiración nuestro cuerpo se carga de energía. La energía fluye por nuestro cuerpo a través de tres canales principales que son:

  • el central, llamado sushumna, que corre a lo largo de nuestra columna vertebral, desde la pelvis hasta la coronilla. A lo largo de él se alinean los siete chakras principales
  • ida o canal lunar, que corre por el lado izquierdo de nuestro cuerpo, coincide con nuestra fosa nasal izquierda, va paralelo a Sushumna, y al llegar al entrecejo cruza hacia el lado derecho de nuestro cerebro, y
  • píngala o canal solar, que hace lo mismo por el lado derecho, va paralelo a Sushumna y al llegar al entrecejo cruza hacia el lado izquierdo y coincide con la fosa nasal derecha 

Respiración lunar

La respiración que hacemos a través de nuestra fosa nasal izquierda se denomina respiración lunar, y con ella vamos a estimular el canal energético ida. Este pranayama genera calma y tranquilidad mental, refresca el cuerpo, activa el principio femenino, revitaliza el organismo, induce a la meditación, reduce el exceso de bilis, estimula la creatividad. Cuando sentimos que estamos demasiado cargados de energía debemos hacer esta respiración.

Con los dedos índice y mayor o del medio taparemos nuestra narina derecha y respiraremos solo por la fosa nasal izquierda. La mano izquierda la podemos colocar en nuestro abdomen para tener conciencia de que estamos llevando el aire hasta él. Este pranayama debe practicarse en la noche, antes de dormir.

Respiración solar

La respiración que hacemos por nuestra fosa nasal derecha se denomina respiración solar. Con esta práctica vamos a estimular el canal energético Píngala, o canal solar. Se realiza a través de la fosa nasal derecha y es recomendable ejercitarla cuando sintamos cansancio, desgano, apatía, tristeza, depresión. Es un movimiento de energía que va a activar nuestro canal solar. El nadi píngala que se relaciona con el sol estimula nuestro lado de acción, de actividad, masculino, que da calor, que da movimiento, que activa nuestra energía. Con los dedos índice y mayor o del medio taparemos nuestra narina izquierda y respiraremos solo por la fosa nasal derecha. La mano derecha la podemos colocar en nuestro abdomen para tener conciencia de que estamos llevando el aire hasta él. Este pranayama debe practicarse en la mañana.

Respiración alterna o Anuloma Viloma

Cuando necesitamos alinear nuestra energía es recomendable practicar la respiración alterna o Anuloma Viloma.

Taparemos de manera alternada la fosa nasal derecha y fosa nasal izquierda. Esto lo podemos hacer de manera sencilla con los dedos índice y medio de la mano derecha, colocándolos de manera alternada sobre una u otra narina.

Empezaremos tapando la fosa nasal derecha, e inhalando por la fosa nasal izquierda. Aguantaremos la respiración unos cinco segundos, taparemos la fosa nasal izquierda, exhalando por la narina derecha, y manteniendo los pulmones sin aire por unos cinco segundos. Seguidamente inhalamos por la narina derecha, aguantamos cinco segundos, tapamos la narina derecha y exhalamos por la fosa nasal izquierda y aguantamos luego de exhalar.  

Como vemos, este pranayama es muy específico y sigue un patrón que es: tapar narina-inhalar, -tapar narina, -exhalar, -inhalar, -tapar narina, -exhalar, -inhalar, -tapar narina. Al principio puede parecer un poco complicado, pero con la práctica conseguiremos realizarlo.  

Beneficios de una respiración adecuada

Respirar de forma adecuada puede ofrecernos muchos beneficios:

  • mejora nuestra capacidad pulmonar
  • mejora nuestra concentración
  • nos enfoca en el aquí y el ahora
  • mejora el funcionamiento de nuestro sistema nervioso, circulatorio, cardiovascular
  • nos relaja
  • nos da serenidad y paz mental

Respirando conscientemente, practicando adecuadamente los pranayamas en tu rutina de yoga acompañando la ejecución de las asanas y concentrándote en ellos durante la meditación, sana tu cuerpo respirando como los yoguis.

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