Entendiendo el karma: 12 puntos para entender cómo funciona

Justo ayer tuve una tutoría grupal con mis estudiantes, con esa hermosa comunidad de yoguis a la que me debo. En medio de resolver preguntas comunes terminamos hablando sobre el karma. Esto al parecer generó mucha curiosidad. Nos llovieron mensajes pidiendo un poco más de información que nos permita ir entendiendo el karma.

Como estoy comprometida con mis yoguis, vamos a empezar a desarrollar este tema para los estudiantes de la Escuela LDY. Lo profundizaremos también en uno de esos usuales encuentros yoguis en vivo que ocurren cada miércoles de cada semana.

Entendiendo el karma

El karma es un concepto que se usa mucho en la actualidad y se ha interpretado de muy diversas maneras.

La visión yóguica del concepto de karma se trató por vez primera en el Bhagavad Gita, uno de los textos clásicos del yoga, que tiene unos 2.000 años de antigüedad. Allí se explica todo lo que tiene que ver con el karma-yoga.

La palabra karma proviene del sánscrito y significa «acción». Básicamente, se resume a la energía que genera el individuo con cada una de sus acciones o pensamientos.

El karma es neutro, no es positivo ni negativo, es el resultado de lo que causamos nosotros con nuestras decisiones, igual que una ley de causa y efecto.

Para esta filosofía, hoy estamos donde estamos por lo que hicimos en el pasado, y lo que hagamos en el presente repercutirá en nuestro futuro, no existe la casualidad.

Es decir, si en el pasado tuvimos pensamientos o acciones negativas, que generaron una energía negativa por parte nuestra, lo más probable es que vivamos en un presente duro y problemático, cargado con la energía que provocamos.

Por el contrario, si siempre hemos generado energía positiva, de manera desinteresada, seguramente estemos viviendo una vida tranquila y bien encaminada hacia nuestros objetivos.

Les dejo este video en el que menciono 12 puntos generales para entender a grandes rasgos qué es el karma.

Espero que lo disfruten mucho, así como yo disfruté hacerlo y disfrutaré desarrollando este Encuentro Yogui para mis estudiantes de la Escuela LDY.

Los 12 puntos que permiten entender el karma

  • La gran ley: karma en sánscrito significa acción. Esta acción se refiere a que todo lo que hacemos en la vida, nuestras acciones, nuestras palabras, van a poner en marcha una energía hacia el universo. Esa energía se moverá por el universo y volverá a nosotros.
  • Creación y libre albedrío: esto tiene que ver con la concepción de que los seres humanos somos libres para actuar, para tomar decisiones, y que a partir de ellas vamos creando nuestra realidad.
  • Humildad: debemos estar conscientes que cada uno de nosotros somos una parte de un engranaje mucho más grande, del universo. Algunas cosas del universo escapan a nuestra comprensión y participación y debemos aceptarlas tal cual son.
  • Crecimiento personal: nosotros solo tenemos control sobre nosotros mismos. Por ello debemos aprender de cada experiencia y evolucionar.
  • Responsabilidad: somos responsables de las consecuencias de nuestros actos, nuestras palabras y nuestros pensamientos. Nos hacemos cargo de nuestras acciones, palabras y pensamientos, y también sabemos que hay cosas del universo que escapan a nuestra participación.
  • Conexión: en el universo todo está conectado. Debemos aprender a vivir y a fluir con todo ese juego de energías que están conectadas.
  • Enfoque: debemos enfocarnos día a día con atención en la tarea que estamos realizando y no tratar de abarcar un montón de cosas. Esto nos permite participar adecuadamente en el juego de energías del universo.
  • Desapego: tiene que ver con que realicemos acciones sin egoísmo, desde la entrega, sin hacerlas esperando una recompensa o resultado. Esto es lo que se denomina en yoga una acción virtuosa, y es la forma más elevada de actuar que tenemos los seres humanos. Cuando actuamos de forma virtuosa es como que nos acoplamos al universo y todo empieza a fluir de manera armoniosa.  
  • Aquí y ahora: solo en el aquí y ahora podemos actuar. Este punto debemos relacionarnos con el del enfoque para determinar en qué debemos concentrar nuestra atención en el momento presente.
  • Cambio: a veces sentimos que en nuestra vida hay ciclos que se repiten, que repetimos errores y que estamos como atrapados. Debemos aprender de esas señales, entender qué es lo que el universo nos está tratando de decir, para ser capaces entonces de cambiar, evolucionar, romper ese ciclo de karma y seguir creciendo y avanzando en la vida.
  • Confianza en el universo: según el karma nada llega a nosotros por casualidad, todo tiene una razón. Debemos tener confianza en que va a llegar a nosotros aquello que necesitamos para aprender, cambiar y evolucionar. Y debemos aceptarlo con humildad. A veces el ego no nos permite ver que lo que deseamos no es exactamente lo que necesitamos para evolucionar.
  • Inspiración y actitud: nuestro karma va a depender de la energía que hayamos puesto en las acciones y no solamente en las acciones mismas. Así que es importante tener en cuenta cuál es la intención, inspiración o actitud que acompañan a nuestras acciones. Es importante no sólo dar lo mejor de nosotros, sino además hacerlo con excelencia, desapego, enfoque y generosidad.

Todos estos doce puntos están interrelacionados y debemos tener confianza en el universo y en nosotros mismos. Si actuamos de acuerdo a nuestro dharma, que es nuestro deber, el rol que debemos cumplir, y por tanto estaremos actuando desde el desapego, con humildad, enfocados en el aquí y el ahora, el universo nos enviará lo que necesitamos para evolucionar y estar en paz y armonía con el todo.

Si actuamos en contra de nuestro dharma, generaremos lo que se conoce como un karma no dhármico. Iremos descubriendo cuál es nuestro dharma en la medida en que vivamos nuestra vida plenamente y vayamos emprendiendo el camino del autoconocimiento.

Definitivamente estos doce puntos son una buena guía para nuestras vidas, así que ¿por qué no ponerlos en práctica? Seguirlos nos ayudará a fluir en nuestro proceso de evolución y espiritualidad.

Cuéntanos qué piensas

No publicaremos tu dirección de correo electrónico.