Mudra: los mudras dirigen flujos de energía en nuestro cuerpo
En el yoga contamos con las asanas que, como sabemos, son posturas que nos ayudan a canalizar la energía y a equilibrar mente y cuerpo y tenemos también los mudras, que son gestos o símbolos que se hacen principalmente con las manos con la finalidad de hacer correr flujos de energía y constituyen también un lenguaje simbólico del cuerpo.
¿Cómo funcionan?
Los mudras se ejecutan mediante diferentes posiciones de las manos y de los dedos. También se pueden hacer mudras con otras artes del cuerpo como los pies, los ojos e incluso con algunas técnicas de respiración.
Son también conocidos como “sellos”, se sabe que los que se ejecutan con las manos influyen en el flujo de energía en el cuerpo y ayudan a abrir los chakras. En general, el uso de mudras durante la meditación nos ayuda a relajarnos y a aumentar nuestra capacidad de concentración.
Nuestras manos son quizás una de las partes más “inquietas” de nuestro cuerpo, además son receptores importantísimos del sentido del tacto, y tienen una conexión muy profunda con nuestro cerebro, por tanto el tenerlas quietas en una posición específica, haciendo contacto entre algunos dedos o entre las palmas entre sí, transmite un efecto de calma al resto del cuerpo y nos permite mantener una mejor postura durante la meditación.
La forma en que tomamos o colocamos nuestras manos influye en la manera en que nuestras mentes y cuerpos se sentirán. Cada mudra tiene un efecto específico en nuestro cuerpo y mente, así que en nuestro trabajo de auto-conocimiento podemos elegir los mudras que consideremos más apropiados a nuestro estado y nuestro sentir e incorporarlos en nuestras sesiones de meditación.
Siete mudras muy populares
Los mudras que se ejecutan con las manos y los dedos reciben el nombre específico de “Hastas” y existen más de treinta. Veamos cuáles son los más populares:
- -Anjali mudra: también conocido como posición de plegaria, consiste en juntar las palmas de las manos una contra otra a la altura del chakra corazón, con los dedos estirados apuntando hacia arriba.
Es el mudra que acompaña a la expresión “namasté’. Anjali en sánscrito quiere decir “dirección” u “oferta”. Este mudra ayuda a crear una sensación de equilibrio entre la mente y el cuerpo.
- –Mudra chin, se conoce también como gesto de la conciencia. Las puntas de los dedos índice y pulgar se tocan formando un círculo con ellos. Los otros tres dedos permanecen estirados.
Se considera que este mudra estimula el chakra raíz, y que por lo tanto cuando se usa durante la meditación nos conecta con la energía de la Tierra. Esta posición de las manos calma nuestra mente y nuestros pensamientos, nos ayuda a sentir la simplicidad y modestia de la vida, y mejora el estado de ánimo en general.
- –Yoni mudra, con ambas manos una frente a la otra, delante de nosotros a la altura del pecho, se ponen en contacto los dos pulgares y los dos dedos índices, formando un triángulo entre las dos manos. Los dedos índice apuntan hacia el piso, los otros tres dedos permanecen doblados los de una mano frente a los de la otra.
Esta posición nos ayuda a trabajar el estrés y la depresión y a mantener nuestro sistema nervioso equilibrado.
- –Vishnu mudra, los dedos índice y medio se doblan hacia las palmas de las manos, y el anular y el meñique se mantienen completamente extendidos. Al principio, puede resultar una posición difícil de mantener. Si no se puede hacer con ambas manos, debe hacerse con la derecha, lo que simboliza absorción de energía positiva. Se considera que este mudra limpia y equilibra los siete chakras principales
- –Gyan mudra, es igual al mudra chin, pero con las palmas de las manos mirando hacia el cielo. Este mudra es muy popular, suele hacerse colocando las manos sobre las rodillas, estando sentados en posición de loto o una postura similar. Este gesto mejora la concentración y agudiza la memoria.
- –Abhaya mudra, este mudra es muy fácil de ejecutar. Se hace con la mano derecha y consiste en poner la mano frente a nosotros, ligeramente por debajo del pecho, y con los dedos apuntando hacia arriba, la palma de la mano debe quedar mirando hacia fuera de nosotros. Debe sentirse una cierta tensión entre el brazo y la muñeca al mantener la mano en esa posición. Se recomienda hacer este sello encontrándonos sentados.
Este gesto es muy antiguo, incluso se ha llegado a considerar que es el primer mudra. Representa la paz y a la vez la intrepidez.
- -Dhyana mudra, se conoce también como el mudra de la meditación. Se recomienda hacerlo encontrándonos sentados. Colocaremos el dorso de la mano izquierda en nuestro regazo y sobre la palma de esa mano apoyaremos el dorso de la mano derecha, y juntemos las puntas de los pulgares de ambas manos. Las dos manos deben quedar relajadas.
El objetivo de este mudra es llevarnos a un estado de concentración profundo y tranquilo, y equilibrar nuestro cuerpo y nuestra mente durante la meditación. Se considera también que contribuye a reducir el estrés y a aliviar la ira.
- Prana mudra, para realizar este mudra primero extendamos las palmas de las manos mirando al cielo, luego doblemos los dedos anular y meñique, y manteniendo los dedos índice y medio estirados, llevemos el pulgar hacia los dedos que están doblados, los cuales deben quedar sujetados debajo del pulgar. Este mudra activa el chakra raíz y brinda una sensación de mayor energía vital,
Como hemos mencionado, existen mudras que se ejecutan con otras partes del cuerpo. Así, los mudras que se ejecutan con la cabeza se denominan Mänas. Para ellos se utilizan los ojos, los oídos, la nariz, la lengua y los labios. Estos se pueden combinar durante nuestro trabajo de yoga y meditación con los asanas, mudras de las manos y pranayamas contribuyendo a dirigir la energía hacia puntos específicos de nuestro ser.